lunes, enero 25, 2016

Viviendas campestres sostenibles

Desde los años sesentas del siglo pasado, las organizaciones ecológicas   impulsaron en el mundo el llamado Principio  de las 3 erres: Reducir, Reutilizar y Reciclar. Las 3 erres  buscaba modificar los hábitos de consumo de las personas contribuyendo a la conservación del medio ambiente. El  conjunto de vivienda campestre Bosques de Granada y Cayundá  en La Calera  también le apunta a una trilogía de sostenibilidad: ambiental, social y económica  que  hacen de este proyecto único  frente a  otras urbanizaciones de su tipo en Colombia.
En el aspecto ambiental se destaca la conservación de los bosques nativos. Los gestores de   la urbanización cedieron a La Calera, de manera excepcional frente a las normas, que solo obligan a ceder el 10%  de los predios,  23 hectáreas de bosque que se convertirán en una  zona de reserva  protegida y hogar de mamíferos como la comadreja y el curí y aves como el colibrí, la mirla, el azulejo y la pava andina. En este bosque  el municipio podrá desarrollar   actividades  educativas y recreativas.  Adicionalmente y dentro de la propiedad se  reforestarán 30  hectáreas  con especies nativas como roble, arrayán, cedro, mano de oso, laurel de cera y aliso, entre otros tipos de árboles.
La  sostenibilidad ambiental  se  desarrolla por medio de la planta de potabilización de aguas lluvias que no solo suministrará el agua  necesaria para las 115 casas  de  Bosques de Granada y Cayundá   sino dispondrá de reservas  hídricas que podrán ser utilizadas por el municipio. “En esta zona llueve  1 millón 600 mil metros cúbicos, 40 veces más de  lo que consume la urbanización que es 40 mil metros cúbicos de agua”, explica  Luis Enrique Maldonado, director de Promotora Entorno 2000 y  gestor de Bosques de Granada y Cayundá.
“En materia de  aguas negras, no haremos vertimientos al alcantarillado ni a las quebradas”, indica Maldonado. Cada  lote tiene un digestor  en donde las aguas negras  son transformadas en gases por bacterias. El agua sin sólidos es  conducida un humedal y luego a una laguna  de oxidación. Posteriormente es llevada por una red paralela y podrá ser usada para regar los bosques que rodean los 115 lotes de la urbanización.
Bosques de Granada y Cayundá  está planeado bajo  el concepto “basura cero”. “Con una planta de procesamiento,  le ofrecemos a los residentes el manejo de sus desechos, previamente clasificados en su origen. De  este modo elaboraremos compostaje con los residuos  orgánicos, y con  los restantes elementos,  insumos reciclables para vender a la industria”,  explica  Luis Enrique Maldonado, quien añade que “al no generar basura  evitamos que nuestros desechos terminen en Mondoñedo con todos sus efectos de contaminación y huella ambiental que implica desplazar  un camión desde La Calera  hasta  ese botadero”.
La sostenibilidad  social se manifiesta con las actividades de  Fundación Ser Verde. “Queremos el rencuentro de dos mundos: el campesino y el urbano y la interacción de sus habitantes”, dice Luis Enrique Maldonado. La Fundación Ser Verde  desarrolla  iniciativas para que  los campesinos cultiven de manera orgánica y vendan sus productos  a los residentes  a buenos precios bajo los parámetros del Comercio justo. También  los campesinos de la vereda Marquez y de La Calera podrán capacitarse en oficios que requieran  los residentes de la  urbanización: plomería, computación, cocina,  servicios generales o silvicultura.
El tercer componente de la trilogía es la sostenibilidad económica. “Nuestra meta era lograr que la cuota de administración fuera cero, y lo logramos”, señala el director de Promotora Entorno 2000, quien profundiza su idea: “se es sostenible económicamente si lo que hay que sostener  cuesta poco, dura mucho y genera ingresos.  Mantener un bosque no cuesta nada, la naturaleza hace  su labor sabiamente. En infraestructura  tenemos vías en concreto e iluminación LED  que  tienen una mayor inversión inicial pero generan  gastos mínimos de mantenimiento y consumo de energía”.  La vigilancia será  electrónica: cámaras de video, sensores, alarma  y monitoreo las 24 horas.  Finalmente,   el alquiler  del salón de eventos y de los locales comerciales, será una fuente de ingresos para la urbanización así como los dineros provenientes del uso de los caballos.
Luis Enrique Maldonado cree que Bosques de Granada y Cayundá  es un ejemplo de urbanismo responsable y auto sostenible. “Este  es un experimento con el que buscamos   acabar con la mentalidad del cortoplacismo y  la utilidad  inmediata que tanto daño le ha hecho al planeta”.