lunes, junio 02, 2014

A la espera de una mejora financiera

Más de tres cuartas partes (76%) de los colombianos son optimistas sobre su situación financiera, de acuerdo con el Índice Genworth, aseguradora global que a través de este estudio mide la seguridad y vulnerabilidad financiera de los consumidores en América Latina, Europa y China.
Los niveles de optimismo en Colombia superan significativamente a países como Chile  y México, en donde el 58%  y 57%  de los encuestados respectivamente, creen que sus perspectivas financieras mejorarán en los próximos 12 meses. Solamente los encuestados en Perú muestran niveles similares de optimismo al de nuestro país con un 76%. En Antioquia, los resultados fueron un poco más bajos (69%) y en Bogotá fueron más optimistas (82%).
Colombia se ubicó en el segundo lugar en Latinoamérica, avanzando dos puestos con relación al año anterior, y en cuarto lugar en el ranking global del Índice Genworth.
Los colombianos siguen siendo vulnerables a una caída en los ingresos
Aunque en general son positivos sobre su futuro financiero, los colombianos siguen siendo vulnerables a un cambio repentino de su situación y a una reducción en sus ingresos. Casi cuatro de cada cinco de los encuestados (79%) han tenido dificultades financieras al menos "algunas veces" en los últimos 12 meses. Además, sólo el 16% de los encuestados consideraron ser “financieramente seguros”[1] según el Índice Genworth. Este resultado es significativamente menor  que el de  Perú (21%) y Chile (22%).
El índice también reveló que el (38%) de los encuestados en Colombia han pedido dinero prestado a familiares y amigos en los últimos 12 meses.  Más de un cuarto (29%) han obtenido un préstamo bancario para financiar necesidades de su vida cotidiana. Casi 1 de cada 5 personas (18%) ha comprado bienes a plazos;  el 15% ha vendido artículos personales (por ejemplo, automóviles, equipos electrónicos) y el 14% ha solicitado un crédito a un prestamista informal. Otro 13% ha gastado dinero en una tarjeta de crédito sin conseguir llegar a pagar el saldo pendiente en su totalidad al final del mes.