martes, noviembre 10, 2009

Los talleres navideños de Papá Noel están en Centro Chía

Papá Noel llegó a Centro Chía acompañado de sus duendes para inaugurar la temporada navideña. Ellos con su alegría y amabilidad se estarán todos los días para compartir con los niños de Bogotá, Chía, y la Sabana Cundiboyacense todo su conocimiento en la elaboración artesanal de regalos.
Ante el interés de los duendes navideños por quedarse en Centro Chía, el centro comercial tuvo que construir 6 hermosas casas temáticas que en el día harán las veces de talleres y en la noche servirán de refugio a sus curiosos huéspedes. Cada uno de ellos de acuerdo a su talento hizo algunas exigencias:
El duende la plastilina exigió que su casa e incluso los animales que la acompañarán estuvieran recubiertos con este material. En esta casa de 2.80 mts de altura el duende les enseñará a los niños a elaborar réplicas de los animales de la granja en plastilina.
El experto panadero pidió una casa hecha con dulces golosinas y chocolates para atraer a los niños y enseñarles en su taller a decorar galletas en forma de animales que no sólo pueden comerlas, también pueden usarlas para adornar el árbol de navidad.
La elegante dama del grupo, una duendecilla experta en elaboración de joyas solicitó a la gerencia de Centro Chía que su casa fuera como las de los cuentos de hadas, que estuviera cubierta de enredaderas que le dieran un toque de misterio para que nadie sospeche que guarda millones de hermosas piedras e hilos mágicos con los que niñas y niños podrán aprender a hacer collares y pulseras. Para el duende artístico, se diseñó una morada hecha en lápices y crayolas que servirán de estudio para que los pequeños artistas aprendan el oficio de la elaboración de figuras en foamy para decorar el árbol de navidad.
No todos los duendes fueron tan exigentes, el ceramista y el carpintero prefirieron lugares amplios y sin lujos. El carpintero decidió quedarse en un establo donde pudieran entrar muchos niños a aprender a decorar con vinilo y escarcha las figuras que él elabora en la noche. El ceramista simplemente pidió un amplio espacio donde ubicar los marranitos de cerámica que regalará a los niños que quieran aprender con él pintarlos. A partir del sábado 7 de noviembre y durante toda la temporada navideña, estos curiosos huéspedes del centro comercial esperarán a los pequeños que presenten facturas de compra por 50.000 pesos o más para transmitirles sus conocimientos en la elaboración de regalos con un toque de magia traída especialmente desde el polo norte.