jueves, marzo 05, 2009

El FMI llama a actuar frente a la tercera ola de la crisis mundial en los países más pobres

La crisis financiera mundial está asestando un duro golpe a los países pobres de regiones como África subsahari ana , advirtió Dominique Strauss-Kahn, Director Gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), alentando a la comunidad internacional a actuar con urgencia y generosidad a fin de evitar los efectos posiblemente devastadores en los países más vulnerables.
“Tras sacudir primero a las economías avanzadas y luego a las emergentes, una tercera ola desencadenada por la crisis financiera mundial está golpeando a los países más pobres y vulnerables del mundo”, afirmó Strauss-Kahn con ocasión de la presentación de un nuevo estudio del FMI sobre las repercusiones en los países de bajo ingreso, titulado The Impact of the Financial Crisis on Low-Income Countries. “Por eso peligran los principales logros de muchos países de bajo ingreso que durante la última década consiguieron estimular el crecimiento, aliviar la pobreza y afianzar la estabilidad política. Insto a los donantes a ponerse a la altura de las circunstancias y proporcionar el financiamiento necesario para proteger lo que tanto costó lograr y para impedir una crisis humanitaria”.
Según el estudio del FMI, más de 20 países son especialmente vulnerables a la crisis actual. Este año se necesitarán como mínimo US$25.000 millones en financiamiento concesionario urgente para los más afectados, pero la cifra podría llegar a ser mucho mayor en vista de los graves riesgos a la baja para las perspectivas económicas mundiales y la posibilidad de que otras economías se resientan a medida que se agrave la crisis. “Los donantes bilaterales deben asegurarse de que la ayuda aumente, no que disminuya”, señaló Strauss-Kahn. “En un momento en que las economías avanzadas están invirtiendo cientos de miles de millones de dólares en estímulo fiscal y reestructuración del sector financiero, debemos encontrar margen para ayudar a los países de bajo ingreso”.
Strauss-Kahn advirtió que la desaceleración del crecimiento podría tener repercusiones graves para la pobreza y también quizá para la estabilidad política, y acotó que es necesario ampliar el gasto en programas de protección social focalizados en los pobres. Al mismo tiempo, será crítico mantener el gasto en atención de la salud, enseñanza e infraestructura vital. Asimismo, hizo hincapié en su objetivo de duplicar la capacidad de préstamos concesionarios del FMI. Añadió que el FMI también está buscando la manera de flexibilizar el crédito que otorga a los países de bajo ingreso, teniendo en cuenta su creciente diversidad y su mayor exposición a la volatilidad mundial. “El FMI está organizando una respuesta extraordinaria frente a una crisis extraordinaria que enfrentan las economías más pobres del mundo”, declaró.
La crisis financiera mundial está asestando un duro golpe a los países pobres de regiones como África subsahari ana , advirtió hoy Dominique Strauss-Kahn, Director Gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), alentando a la comunidad internacional a actuar con urgencia y generosidad a fin de evitar los efectos posiblemente devastadores en los países más vulnerables. “Tras sacudir primero a las economías avanzadas y luego a las emergentes, una tercera ola desencadenada por la crisis financiera mundial está golpeando a los países más pobres y vulnerables del mundo”, afirmó Strauss-Kahn con ocasión de la presentación de un nuevo estudio del FMI sobre las repercusiones en los países de bajo ingreso, titulado The Impact of the Financial Crisis on Low-Income Countries. “Por eso peligran los principales logros de muchos países de bajo ingreso que durante la última década consiguieron estimular el crecimiento, aliviar la pobreza y afianzar la estabilidad política. Insto a los donantes a ponerse a la altura de las circunstancias y proporcionar el financiamiento necesario para proteger lo que tanto costó lograr y para impedir una crisis humanitaria”.
Según el estudio del FMI, más de 20 países son especialmente vulnerables a la crisis actual. Este año se necesitarán como mínimo US$25.000 millones en financiamiento concesionario urgente para los más afectados, pero la cifra podría llegar a ser mucho mayor en vista de los graves riesgos a la baja para las perspectivas económicas mundiales y la posibilidad de que otras economías se resientan a medida que se agrave la crisis. Strauss-Kahn advirtió que la desaceleración del crecimiento podría tener repercusiones graves para la pobreza y también quizá para la estabilidad política, y acotó que es necesario ampliar el gasto en programas de protección social focalizados en los pobres. Al mismo tiempo, será crítico mantener el gasto en atención de la salud, enseñanza e infraestructura vital.
Asimismo, hizo hincapié en su objetivo de duplicar la capacidad de préstamos concesionarios del FMI. Añadió que el FMI también está buscando la manera de flexibilizar el crédito que otorga a los países de bajo ingreso, teniendo en cuenta su creciente diversidad y su mayor exposición a la volatilidad mundial. “El FMI está organizando una respuesta extraordinaria frente a una crisis extraordinaria que enfrentan las economías más pobres del mundo”, declaró.